Me encontraba un día por Valencia y los auriculares In-Ear de mi smartphone directamente murieron. Con ganas de seguir escuchando música, decidí acudir a un centro comercial y ver lo que podía comprar con un billete de 10€. Después de ver marcas muy extrañas, me encontré con estos Jbl T110, los cuales valían algo menos de lo que me quería gastar.
Los materiales de construcción son muy básicos, plásticos de una resistencia normal para poder aguantar más o menos batalla. El cable es plano, algo que nos ayudará a que no se líen tanto como suele ser habitual en este tipo de auricular. Evidentemente este tipo de cable es bastante microfónico, es decir notarás una vibración cuando rocen con la ropa.
Las especificaciones de estos Jbl T100 son:
Sensibilidad del driver a 1kHz1mW (dB) 96.0
Respuesta de frecuencia dinámica 20 Hz – 20 kHz
Impedancia de entrada (ohms) 16.0
Número de drivers por auricular 1.0
Gracias a tener una impedancia bastante baja, pueden funcionar sin ningún tipo de problema en cualquier dispositivo donde los conectemos.
Cuentan con un simple manos libres, con el cual podrás responder a las llamadas, colgar, poner en marcha la reproducción de música, pararla, etc. En él, viene incluido un micrófono, por supuesto su calidad es muy básica. Servirá para que te escuchen tanto en llamadas como en aplicaciones de mensajería, etc., pero obviamente, no esperes poder llegar a cantar de forma profesional con ellos.
La duración de estos auriculares es muy relativa, a mí me duraron aproximadamente un año, como suele ser habitual en este tipo de auriculares. El conector jack de 3,5 mm tiene un guardacables bastante básico. Se suelen romper por esta parte, lo que produce que solo se escuche por un canal, o directamente dejen de sonar.
En el apartado sonido, me sorprendió la escena sonora tan amplia que tienen, tratándose de unos auriculares de tan poco valor. Aparte, su sonido puede llegar a convencer a mucha gente tal y como explico en el siguiente vídeo.
